Hace tiempo, cuando me dedique de lleno a traducir corregir e integrar los subtítulos de Mobile Suit Gundam para poder verla como Dios manda (un trabajo de un mes que me hizo desistir de repetirlo alguna vez en mi vida); tuve que buscar intensamente en Internet cualquier pedazo de información que me ayudara en mi trabajo. Esto me permitió averiguar que Yoshiyuki Tomino había escrito una novela sobre esta serie. En conjunto con el manga, la novela de toda la serie se dividió en tres volúmenes acompañados por imágenes; que le dieron un valor agregado. Aunque no me fue de mucha utilidad, me percaté de que estaba ante un medio diferente de escritura que no comprendía. Con el tiempo logré entenderlo. Estaba frente de uno de los primeros ejemplos de una novela ligera y no lo sabía.

Los primeros trabajos de novelas ligeras fueron las sagas épicas La Legenda de los Heroes Galácticos y la Heroica Legenda de Arslan, del Dr. Yoshiki Tanaka; sagas muy populares en los 80's y 90's en Japón. Así mismo la serie Slayers, que combina fantasía con juegos de rol, comenzó en este formato. Pero el gran salto para este género literario se dio con la serie Boogiepop, un éxito literario que de inmediato se transformó en un manga y un animé. Con el boom provocado por Haruhi Suzumiya las ventas del género se elevaron a niveles nunca antes vistos. A partir del 2008 el género se solidificó con la afluencia de escritores y lectores hasta el nivel de éxito de la actualidad.
El género de novela corta ha ganado una gran popularidad en Japón, hasta el punto de llevar a cabo constantemente concursos en busca de nuevos escritores. Las novelas ligeras de este género se imprimen en pasta delgada a un precio accesible para todo público. Con 30 millones de unidades vendidas por año, 166 millones de dolares de ganancia neta y el 20% en el formato bunkobon como respaldo, estamos ante un pura sangre que se ha ido ganando su espacio en el mercado durante el tiempo.









