 |
| Game of thrones season 4 |
Por: Tavo Quiros
Adonde van las putas?, si has leído danza de dragones, el quinto libro de canción de hielo y fuego de George R.R. Martin, fijo reconocerás ese cuestionamiento interno que mortificaba e impulsaba como combustible a nuestro gnomo favorito, Tyrion Lannister; igual bastaría con estar un poco empapado de esta emocionante historia para que esa frase pasase frente a nuestros ojos, pero, según apunta todo, aquellos que nada más disfrutan de la serie más exitosa de HBO, no conocerán dicha incógnita, ya que este universo ha tomado un cause que se aleja poco a poco, más y más de la fuente donde de donde se originó.
La manzana cayó muy cerca de este árbol, pero al parecer de repente comenzó a rodar por su propio impulso y aunque sigue siendo fruto, su sabor ha variado ya bastante.
Este 15 de julio del 2014, el mundo presencio el capitulo numero 10 de la cuarta temporada, basada en la segunda parte del tercer libro, tormenta de espadas, y venia anunciadamente bastante cargadita de eventos importantes.
La muerte de uno de los personajes más repugnante vistos en un pantalla (claro está, después cualquiera del elenco de Twilight), Joffrey Lannister, perdón, Joffrey Baratheon, rey ilegitimo de los 7 reinos cuyas posaderas de adolescente cruel y sanguinario duraron poco sobre el trono de hierro, el día que se transmitió la boda purpura las redes se llenaron, de mensajes de cariño para este memorable jovencito. Admitamos lo, sentimos rico al verlo morado en el piso, en una imagen grosera y muy poderosa.
La muerte de Lysa Tully, la cual en lo personal disfrute mucho, grande meñique, pobre del tipo, le toco cumplir le como marido, pero se desquito sabroso de la vieja loca.
El juicio de Tyrion, al pobre enano la vida lo ha maltratado mucho, ya le había tocado un juicio por combate en el nido del águila, amenazado de caer por la puerta de la luna, ahora su propia familia le reservo un lugar debajo de la hoja de la guillotina. Esta acusación era el néctar del cual nos embriagábamos en cada capitulo, y en el entrañable capitulo 7 presenciamos todo un triller de abogados, con una actuación de Peter Dinklage, que no será olvidada con facilidad.
La justa entre Oberyn Martell y la montaña que cabalga (cabalgaba), una de la escenas más violentas, gráficas y desensibilizantes que muchos hayan presenciado, la víbora roja entro de inmediato en los corazones de los espectadores y para aquellos
que no estaban en sobre aviso, su auto-nominación como campeón del menor de los hermanos de roca Casterly, fue toda una sorpresa, y su sesos embarrados en el piso, bueno, otra.
La muerte del perro, ya acostumbrados un poco a la pareja cuasi cómica de la pequeña loba y el sabueso de Joffrey, su muerte resulto más bien trágica, era un caballero errante con su propio código y una visión realista bastante exenta de florituras innecesarias. su muerte fue la que más vario desde el libro, pero el desgaste del personaje de Clegane y el de Brienne de Tarth fue un buen detalle que se agradece.
La muerte de Shae, muere Shae, muere, la única razón por la que la quiero viva es para que Tyrion la mate de nuevo.
El destierro de Ser Jorah Mormont, el amo de la zona de amigos, era una rata, ya no le es, pero lo era, así que le salio barato, y si el no hubiese salido de Meereen, la historia perdería algo muy importante que se dilucida mas adelante en la historia.
La batalla en el muro, muy bien HBO, muy muy bien, muchos se entristecieron con el capitulo mas irregular de las 4 temporadas, donde se perdió bastante ese viejo ejercicio de los capítulos multi personajes, para encontrar uno casi dedicado en su totalidad al bastardo de Jon Snow. pero créanme, ese capitulo, es un logro en lo que a adaptaciones se refiere, fue, como debía de ser.
Stannis Baratheon, poniendo un pie sobre el continente, no es importante ahora, pero luego, lo será todo, como elemento emulsificante de la historia.
La muerte de Tywin Lannister. El hombre que cagaba oro, bueno, murió intentando dicha proeza, y aunque era una muerte tan anunciada como la de Robb Stark, el verla en pantalla resultaba invaluable, se gano nuestro odio y respeto, nos cargo, y nos cargo desde su primera aparición, y desde su primer muestra de desprecio hacia Tyrion, para luego poner todo de cabeza a punta de flechas de ballesta.
Bran, Arya, Sansa, no tuvieron tanta participación pero de ellos no hemos visto ni la punta del Iceberg, lo que viene adelante, los va a dejar boquiabierto, y no crean que me olvide de la “ultima” de los sangre de dragón, pero ella tuvo que hacerse un poco al lado durante esta temporada, mientras se entrena para ser reina de los 7 reinos. Pero no le pierdan la mirada ni por un momento.
En general, la serie no ha perdido su valor, su riqueza y sus fortalezas, la historia únicamente emociona más y más, esta temporada supero por mucho a la tercera, que ha sido la más flojita de todas desde su inicio, este será un invierno muy largo hasta el estreno de la quinta.
Vallar Morghulis.
