Jin-Roh

Jin-Roh, La Brigada del Lobo (2000)

 

Las múltiples facetas de Mamoru Oshii

Hablar de Mamoru Oshii es muy complicado. Es un director afamado y reconocido en Japón, con intervenciones magistrales tanto en cine como televisión, en películas animadas o normales. Pero ante todo estamos hablando de un genio excéntrico, con un estilo único que combina la música con la animación de escenarios para producir reacciones en el espectador. Esto combinado con tramas que requieren de pensamiento no convencional (y mucho cerebro) para entender produce críticas ácidas en occidente. Los comentarios que he leído sobre este director oscilan entre “genio entre genios” y “por qué diablos hay gente que todavía le gusta”. Para mi, enfrentarme a una de sus película requiere respirar profundamente, borrar todo lo que tenga en la mente y poner mucha atención a la película para disfrutarla y ENTENDERLA. Por dicha he tenido éxito entendiendo cada una de sus entregas.

Jin-Roh: La Brigada del Lobo

Pero una de las contribuciones más relevantes de este afamado director es como escritor. Con la Saga Kerberos (una serie de cómic y radio que ha estado en el mercado japones por veinte años) el autor incursiona en el retrofuturo como alternativa para los cambios de la sociedad japonesa producto de la crisis de los 90 y el fracaso de la generación Y. En la forma metafórica de un Japón dominado por Alemania después de la Segunda Guerra Mundial, la historia combina el género militar con el detective; con un abierto mensaje de derechas y un desprecio a la sociedad civil que gobierna el Japón actual. Por supuesto, cuando tuvo suficiente poder luego del éxito internacional de su película Ghost in the Shell, Mamoru vio la oportunidad de incursionar con su historia en el anime con una película. Desconocida para muchos, Jin-Roh sale a los cines en junio del 2000 con su trama subversiva y una fuerza demoledora. Lo irónico es que la historia se sujeta de un cuento popular, “Caperucita y el Lobo”. Aunque de una forma muy peculiar.

Ficha del Anime

Jin-Roh

  • Director: Hiroyuki Okiura
  • Concepto original: Mamoru Oshii
  • Música: Hajime Mizoguchi
  • Estudio: Production I.G.
  • Junio 2000

Inicio! Spoilers!

 

Si quieres adentrarte en la trama de este animé, puedes entrar a mi artículo: [Spoilers] Jin-Roh. ¡Allí te cuento todo lo que acontece en este animé, léase con precaución!

Fin! Spoilers!

Una metáfora de la política en Japón 

¿Qué se podía esperar de una historia política con un héroe que usa armadura corporal y una MG-42? La verdad es que la densidad de la trama y la profundidad del tema es algo que mantiene atado a un espectador deseoso de conocer la verdad, pero no ata a un espíritu inquieto que busca acción. Salvo contadas ocasiones, la película hace valer los métodos del escritor (el director Hiroyuki Okiura es muy respetuoso en ello) para exponernos a profundidad algo del Japón que el otaku moderno desconoce, la política. Como el shonen requiere que exista un héroe, el enfrentamiento con la burocracia aburriría al lector así que debe entregarse una trama sencilla que un adolescente pueda comprender. Esto no tiene nada que ver con los matices políticos que ofrece esta película, donde todos los bandos se aprovecha de la menor vacilación en la situación presente para hacer valer sus derechos. No importa si es dentro del mismo gobierno, la lucha entre la Policía y la Milicia por el poder es una callada con muchas víctimas inocentes.
 
 
Jin Roh (tal como el resto de la Saga Kerberos) es una obra subversiva y controversial, porque habla de una verdad del Japón moderno. Envuelto en una red de mentiras, los intereses de los partidos traspasan las barreras civiles e involucran muchas veces a los militares. Las Fuerzas de Auto-Defensa de Japón se ha visto envuelta en numerosos escándalos en los últimos años debido a que es un “ejército” en espera. Como un títere de la lucha entre la derecha y el socialismo, el milagro japones no nos permite comprender lo que hay de fondo en el Imperio del Sol Naciente. Una derecha que niega los crímenes cometidos en la Segunda Guerra Mundial, una recuperación económica que no ha alcanzado para salir de la crisis de los años 90 y el alarmante descenso en la población de la última década han condenado a las islas a un futuro incierto, tal como en esta película y en la mayoría de las obras de este director. Esperemos por el bien de nuestros gustos que se puedan sobreponer a este destino para que podamos seguir gozando del anime y el manga que tanto nos gusta.