Action Comics #1 – Nuevo Universo DC

¡El renacimiento de Superman para la generación del siglo XXI ya está aquí! En el relanzamiento del Universo DC, la cabecera Action Comics nos trae a un Superman más cercano a sus orígenes en Action Comics #1 (junio de 1938), como un joven extraterreste con fuerza y resistencia sobrehumana, pero sin la capacidad de volar y con el potencial de ser herido.

Señalaba en los años 70 el escritor Gerald Clarke los personajes de cómics debían mantenerse evolucionando continuamente para mantener su relevancia y así representar el ánimo actual. En un mundo donde el ciudadano común se siente desvalido ante los abusos de las corporaciones multinacionales y desilusionado por la inefectividad de los gobiernos, Superman vuelve a erigirse tal como en sus  comienzos como el protector del pueblo; quien actúa a sabiendas que la ley no es igual para pobres y ricos, por lo que hace lo necesario para enderezar las injusticias: trátese de un ordinario agresor de mujeres o de un millonario corrupto.

Y así, tal como sucediera en el Action Comics #1 de 1938, atestiguamos como Superman utiliza sus dones para castigar a un poderoso corrupto.

Sin embargo, la policía de Metrópolis no está contenta de su accionar, aunque no es mucho lo que pueden hacer por detenerlo. De esta forma, Superman irrumpe en el piso del señor Glenmorgan -uno de los hombres más ricos de la ciudad- y tras apalear a sus escoltas le conmina a confesar sus delitos.

Glenmorgan se resiste. Ante la mirada atónita de los oficiales de la ley, Superman se deja caer al vacío con el empresario. En el último instante, le toma entre sus brazos, soportando el impacto en el asfalto de pie. La experiencia es demasiado fuerte para el hombre, quien comieza a confesar sus delitos. El Hombre de Acero amenaza con volver y huye corriendo a toda velocidad, dejando atrás a las patrullas que intentan darle alcance.

Mientras tanto, en unas instalaciones desconocidas, dos importantes hombres discuten el problema que representa Superman, quien cada vez se vuelve más fuerte y veloz. Éstos son ni más ni menos que el General Sam Lane y el empresario Lex Luthor. Luthor acertadamente señala a Superman como un elemento alienígena que desestabilizará el equilibro de poder, y prepara una trampa para que el General pueda capturarlo.

En un edificio destinado a la demolición se pone en marcha el plan. La maquinaria de demolición entra en acción, a pesar de que hay gente habitando. Superman interviene, detendiendo la pesada bola demoledora, solo para ser emboscado por tanques equipados para capturarlo.


Cuando Superman demuestra ser más de lo que los tanques pueden manejar, los soldados usan armamento de combate, logrando herirle. En el momento en que está vulnerable, es la gente del edificio quienes le salvan a él, protegiéndole con sus cuerpos y dándole tiempo de huir con uno de sus gigantezcos saltos.

Superman logra regresar al edificio donde vive, cambiando su apariencia en la azotea a su verdadera identidad. Así sabemos que Clark Kent es un joven reportero que vive pobre y solo, denunciando la corrupción de la ciudad con sus reportajes. Así logra enmascarar sus heridas recibidas como “Superman”.

Clark intenta contactar con el periódico, para descubrir que Lois Lane y Jimmy Olsen (reporteros de la competencia)  van tras la pista de un peligroso delincuente en el tren bala de Metrópolis: Gus Grunding, uno de los matones del señor Glenmorgan. A pesar de las advertencias de Clark, ellos proceden a seguir al matón.

Entre tanto, una bomba cronometrada espera bajo un puente en la  ruta del tren.

Superman entra en acción, corre para atajar el tren. Sin embargo, la fuerza de inercia del mismo es demasiado para su fuerza, por lo que la sangre brota de sus oídos por el descomunal esfuerzo. Casi desmayado, finalmente el tren comienza a detenerse.

Pero, cuando ya se sentían a salvo, la bomba estalla lanzando el tren al vacío.

Superman intenta controlar la caída de la mole metálica, con relativo éxito, solo para terminar aplastado contra la entrada del periódico Daily Planet. Tal y como lo había planeado Lex Luthor.

Próximamente: ¡Superman en cadenas!

  • Espero que pronto llegue a las librerias del país, ya llevo rato preguntando.