Sword Art Online ¿La apuesta épica de la década?

Para el que no es otaku conocedor, el año en las naciones con poderosas cadenas de televisión que dominan el mercado se divide en las cuatro estaciones (primavera, verano, otoño e invierno), a diferencia de las novelas eternas latinoamericanas que sólo acaban si los ratings bajan demasiado. Durante unas diez semanas en promedio el grupo creativo que da vida a una serie se reúne para hacer el número de capítulos que corresponde a una temporada (generalmente 26 episodios, la mitad de las 52 semanas de un año). Por razones que escapan del control de los productores generalmente no se completan esa cantidad de capítulos, o la serie se recorta a la mitad por razones de presupuesto (media temporada). Esa es una regla tradicional en todas las producciones de televisión. Por eso, cuando hacia agosto de 2012 contemplé Sword Art Online las preguntas que saltaron a mi cabeza de inmediato fueron ¿cuánto duraría? y por supuesto ¿si la serie conservaría su calidad inicial hasta el final de la temporada? Porqué estas preguntas. Porque SAO es una apuesta a ganar, con mucho dinero de por medio.

Sword Art Online nace como una novela ligera, obra de Reki Kawahara (también autor de AccelWord con la comparte muchos recursos en tema y tecnología). Como nota graciosa, el primer libro de la serie fue concebido originalmente como el borrador para un concurso de novela ligera de la Ascii Media Works (la casa que serializó Azumanga Daioh), pero no envió la entrega porque excedía el tamaño. Por esta razón él publico la historia en la red y escribió los siguientes cuatro volúmenes. Fue hasta la serialización de la que ahora se considera su primera obra AccelWord que la compañía le solicitó su primera historia para su publicación. De esta forma, el primer libro de Sword Art Online fue publicado en abril del 2009.

Debido al masivo éxito de las novelas, a pesar de que su antecesora todavía estaba en producción, Aniplex adquirió los derechos, A-1 Pictures la produjo con el director Tomohiko Ito al mando del timón y con la música de Yuki Kajiura (una especialista en bandas sonoras). Si consideran que estos detalles no son importantes (bla, bla, bla), tal vez les interese que todas estas compañías e individuos están bajo el ala de Sony, el gran gigante de los medios de comunicación y de videojuegos. Esto explica la apuesta económica y en publicidad que representó esta puesta en escena, que obviamente intenta sacar provecho del éxito abrumador de las novelas. ¿Pero en realidad merecía la pena todo ese esfuerzo?
Inicio! Spoilers!





Estamos en el año 2022. A finales de diciembre se estrena un juego, Sword Art Online, mejor conocido como SAO, que según su publicidad revolucionará el mercado gracias a la introducción de la Realidad Virtual como forma de entretenimiento. Diez mil afortunados (los primeros el equipo disponible) tendrán la oportunidad de adquirir el juego durante su primer día de estreno. Kazuto Kirigaya, un joven adolescente, es uno de esos afortunados. Durante su primer día el ingresa al juego con el nombre Kirito e inicia su recorrido en el mundo. Pero una oscura sorpresa lo esperan a él y a sus compañeros en línea. Porque en un enfermo giro del destino, el creador del juego decidió hacer un experimento con ellos. Con esta intención inhabilito la opción de desconexión, reunió a todos los jugadores y les explicó las nuevas reglas del juego. Para los desafortunados en el interior del mundo virtual, ellos deberán completar todos los 100 niveles del juego para poder escapar. El riesgo añadido es que la muerte en el juego provocará el mismo efecto en la vida real. Atrapado sin salida, el joven (que fue uno de sus beta tester originales) inicia su camino en solitario para escapar de la pesadilla en que se encuentra.


Ojo! Spoilers!







En la primera mitad de la serie (que abarca todo el arco de las primeras dos novelas gráficas), durante dos largos años Kirito debe pelear su salida del mundo virtual. Este lamentablemente pone en evidencia lo mejor y lo peor de la naturaleza humana. Presas de la desesperanza, ante el trauma constante de la muerte que los acompaña; los jugadores se dividen en bandos, los Front-Liners como Kirito que combaten por abrir el piso y terminar el juego y los gremios inferiores (cleaners, Player Killers o PK, público en general), que se dividen de acuerdo a la naturaleza propia del hombre (bien y mal). Durante estos años Kirito conoce y se hace amigo de varios jugadores (algunos de los cuales pierde). También conoce el amor en la forma de una fiera, determinada pero frágil espadachina que responde al nombre de Asuna. El estrés y las pérdidas de jugadores a su alrededor los unen y los lleva a casarse (una condición en la que las parejas comparten equipos y recursos), a comprar un hogar en el piso 22 de Aircard y criar a una niña desconocida que los adopta como sus padres.



Ojo! Spoilers!








Luego de un enfrentamiento particularmente vicioso contra el jefe del piso 85, Kirito descubre que Heathcliff, el líder del gremio Los Hermanos de Sangre al cual pertenece en este punto de la historia es un objeto inmortal. En realidad, este jugador es Akihiko Kayaba, el diseñador en jefe de SAO y el jefe final del juego. Luego de admitir su identidad, ambos se enfrentan en un duelo uno contra uno para finalizar el juego, en el que Kirito obtiene la victoria a costa de su vida y la de su amada. Mientras en el limbo observan el derrumbe del mundo, el ingeniero se despide de ambos y el joven despierta en el hospital de su coma.

Ojo! Spoilers!








La segunda parte de la serie se devela una trama más oscura; que introduce un triángulo amoroso, habla con libertad de violencia contra la mujer, acoso, hostigamiento sexual y el deseo de los hombres de creerse superiores a los demás. Porque lamentablemente para Kirito, Asuna no despierta junto con él. En un servidor inspirado en SAO (Alfheim On Line o ALO) un grupo de jugadores toma una fotografía del avatar de su amada en la cumbre. Kirito se embarca en una nueva aventura donde debe alcanzar el Arbol de la Vida en seis días, antes de que un corrupto líder de investigación se aproveche de su amada y se case con ella estando inconsciente. Con la ayuda de Lyfa (una jugadora de ALO que lo introduce a sus bases) y el apoyo moral de su prima Suguha (las dos resultan ser la misma persona); él descubre el oscuro secreto detrás de ALO y regresa a su amada Asuma al mundo real con la ayuda espiritual de Akihiko. Como parte del acuerdo que le confiere la victoria, el científico le entrega La Semilla, que facilita la creación de mundos virtuales y extiende esta innovación alrededor del mundo.



Fin! Spoilers!

Es innegable que la serie animada es de una excelente calidad y con un buen concepto, más por el esfuerzo monetario involucrado en hacerla y por la calidad del material original que por la habilidad de su equipo de producción. Un director novato, que no supo guiar correctamente ni al encargado de estilo ni al guionista, dejaron como resultado algunos agujeros en la obra difíciles de rellenar. Serios errores de tiempo (uno de los episodios más emocionante de toda la serie es el capítulo nueve en el primer tercio de la temporada), de edición y de lógica (el cual hubiese evitado con ciertas referencias de la novela gráfica) provocan que la trama sea inconsistente en algunas partes de la serie (la aparición mágica de la consola para salvar a Yui se explica mejor en la novela gráfica). No le ayudó para nada que a partir de la segunda parte comenzaran a caer en el odioso truco del fanservice para llamar al público (con el incremento masivo de las boobies y la violencia gratuita). Pero ninguna obra es perfecta, de eso puede dar testimonio Neon Genesis Evangelion, que ya sea por las excentricidades de Hideaki Anno o la falta de presupuesto nos quedó debiendo el capítulo 25 y 26 que la mayoría del público quería a cambio de un estudio filosófico a punta de collage de imágenes y que apareció como una película posteriormente. No es necesario preguntar donde se encuentra dicha serie en este momento, dado que es reconocida como una de las mejores de la década de los noventa.

En este momento queda en manos del público japones (y si existe algún excéntrico americano o francés que quiera pagar por eso) la animación de las siguientes novelas ligeras de la serie, ya que esta primera presentación sólo cubrió cuatro volúmenes. Aunque mal traducido al ingles (transluce de lo que los fans han traducido) muestran que el problema en esta fantasía virtual continúa y tiene cuerda para rato. Como la serie ha disparado las ventas de las novelas ligeras, podemos esperar más de SAO en los próximos años. Quizá con el tiempo, ella ocupe el lugar que quiso la Sony que tuviese desde el principio, así como el que muchos fans de los que ganó su corazón, que sea considerada la serie emblemática de esta década (con el apelativo de la mejor serie anime de…). Sólo el tiempo lo dirá, sólo él. Mientras tanto, disfrútenla. Porque la verdad; como propuesta gráfica, de ciencia ficción moderna y de trama, es una de las grandes series del 2012.



Coda: En el final del OVA de Sword Art Online se ha confirmado la segunda temporada de esta serie para algún momento del 2014. SAO II incluirá los arcos de Gun Gale OnLine y la saga Rosario. Estén en contacto para más noticias.

  • Lamentablemente no solo no es candidata a ser el mejor animé de estos años, sino que es candidata a desbancar a Elfed Lied como el animé con el guión más tonto y los personajes más pésimamente creados y desarrollados.

    Kirito es el estereotipo del übermensch japonés, un sobrehumano que igual domina el arte del kendo como los secretos del hacker sin despeinarse, aprende a volar y a controlar los comandos de administrador del mundo virtual, como respirar.

    Asuna, la compañera decorativa, cada vez con menos acción en escena, comienza primero como guerrera, cada vez más devaluada, se convierte en novia, luego esposa, para terminar como damisela en desgracia.

    Y para colmo de males, a todos los personajes decorativos y clichés le sumamos una y otra vez la solución a todos los conflictos se encuentra en un Deus Ex Machina. En fin, un lindo envoltorio para una asco de contenido.

    • No deberías ser tan duro con la serie. Ella tiene sus cosas. Una de las primeras es que Kirito no es el superhumano; es el "jugador mítico", el coco que no puede ser derrotado. Desde ese punto de vista el autor se fijó muy bien en los juegos en línea, porque eso es una pesadilla eterna de estos juegos. Otras cosas de la trama poseen mucha intensidad. De lo que si adolece la serie como tal es de cohesión en algunos puntos. Eso es lo que, en el caso de que venga un nuevo esfuerzo en la década, podría quitarle el lugar que la Sony quiere que tenga.